martes, 22 de mayo de 2012

Cuenta de Presidente sobre Educación


EDUCACIÓN DE CALIDAD PARA TODOS
La educación es, al mismo tiempo, un medio y un fin. Un medio para incrementar nuestras  capacidades y un fin para permitirnos ser más libres y realizarnos en plenitud. Ella es el  principal instrumento de desarrollo personal, de creación e igualación de oportunidades, de movilidad social y de progreso nacional. En consecuencia, Chile solo será una verdadera sociedad de oportunidades cuando todos nuestros niños y jóvenes, y muy especialmente los más vulnerables y de clase media, tengan acceso a una educación de calidad.

Hoy les quiero hablar directamente a los padres y madres. En esta sociedad del conocimiento y la información, una buena educación abre un mundo de oportunidades y su ausencia puede dar lugar a una vida de frustraciones. Todos queremos lo mejor para nuestros hijos: que sean más felices y lleguen más lejos.

El Gobierno de Chile está profundamente comprometido con una reforma educacional que garantice a todos nuestros niños y jóvenes acceso a una educación de calidad. Con crear un sistema más justo y eficaz de becas y créditos, que no discrimine a ningún estudiante por falta de recursos. Y con respetar y proteger la libertad de los padres para elegir la educación de sus hijos y de los ciudadanos para emprender y aportar en el mundo de la educación. Necesitamos tanto del esfuerzo público como privado, y la sociedad civil debe cumplir un rol central. Por eso creemos y defendemos el concepto de sociedad docente, y no solo de estado docente.

Estamos impulsando una amplia y profunda reforma educacional en todos sus niveles. Hoy invertimos uno de cada cinco pesos del gasto público, equivalentes a US$ 12 mil MM en la educación de nuestros niños y jóvenes, el doble que hace seis años atrás. Hace tres semanas presentamos una reforma tributaria, que demanda un esfuerzo adicional a las empresas y sectores más favorecidos, para financiar en forma responsable y sostenible la reforma educacional.

Estos recursos nos están permitiendo aumentar significativamente las subvenciones educacionales y becas para estudiantes, y las remuneraciones de nuestros profesores. Adicionalmente, creamos la Beca Vocación del Profesor, para que miles de jóvenes talentosos, con puntajes sobre 600 puntos en la PSU, estudien Pedagogía en forma gratuita, con el compromiso que cuando egresen eduquen a nuestros niños y jóvenes en las escuelas municipales o subvencionadas.

Pero no basta solo con más recursos. Se requiere también mejor gestión. Por eso promulgamos la Ley de Calidad y Equidad de la Educación, para potenciar y flexibilizar el estatuto docente, fortalecer el liderazgo de los directores y premiar a tantos buenos profesores que se esfuerzan por educar con calidad a nuestros hijos. Hemos creado 60 liceos de excelencia, que permiten a miles de jóvenes de esfuerzo y talento, en todas las capitales regionales de Chile, y en comunas vulnerables y de clase media, como Alto Hospicio, Puente Alto, Renca, Cerro Navia, Conchalí, Quilicura, San Bernardo, Lota, Coronel, Lebu, Purén, Angol, Loncoche, Ancud y muchas más, acceder a una educación de excelencia como la que imparten el Instituto Nacional o el Liceo Carmela Carvajal en Santiago.

Este gran esfuerzo, que no es solo de este Gobierno, sino también de los que lo antecedieron, ya comienza a dar sus primeros frutos. En efecto, luego de décadas de estancamiento, las pruebas Simce de los últimos dos años muestran que, tanto la calidad como la equidad de la educación, y especialmente la de los estudiantes más vulnerables y de clase media, han comenzado, por fin, a mejorar significativamente.

Sin duda esta es una gran noticia para nuestros estudiantes, sus familias, los profesores, el Gobierno y la sociedad entera. Pero aún estamos lejos de alcanzar nuestras metas. Mientras subsista un solo niño sin educación de calidad, el es nuestro niño y su carencia es nuestra obligación. Y si jóvenes talentosos no pueden acceder a la educación superior por falta de recursos, ellos también son nuestros jóvenes y sus sueños de ser profesionales son nuestro compromiso.

La reforma debe comenzar a la más temprana edad, para corregir las desigualdades de origen, igualar oportunidades y nivelar la cancha cuando aún estamos a tiempo. Para ellos estamos incrementando en 40 mil los cupos de jardines infantiles, de la Junji e Integra, y perfeccionando el sistema de salas cuna financiado por las empresas, para evitar discriminar a las mujeres trabajadoras.

Hoy quiero ratificar ante el país nuestro compromiso de garantizar educación preescolar en kínder y prekínder, de calidad y gratuita, a todos los niños y niñas del 60 por ciento de los hogares más vulnerables y de clase media de nuestro país. Esto requiere aumentar en 20 por ciento la subvención y en 75 mil los cupos en este nivel. Yo sé que los niños no marchan ni protestan. Pero su voz se escucha siempre fuerte y clara en La Moneda.

En materia de educación escolar aumentamos en un 21 por ciento la subvención escolar preferencial y ya extendimos este beneficio a séptimo y octavo básico, de modo que hoy la reciben cerca de 900 mil alumnos de educación básica. Y crearemos una subvención especial para los estudiantes de educación media. Ambas subvenciones aumentarán su cobertura desde el 40 al 60 por ciento de los alumnos más vulnerables, lo que incluye buena parte de la clase media, lo que significa un incremento de un millón 20 mil en los niños y jóvenes beneficiados con esta subvención preferencial.

En materia de educación superior, compartimos las aspiraciones de nuestros jóvenes. En dos años hemos duplicado el presupuesto para becas y otros beneficios, pasando de 118 mil becas el 2009 a 280 mil este año. Y las seguiremos aumentando hasta 400 mil al término de nuestro Gobierno, casi cuadruplicando el número de becas y cumpliendo así con nuestro compromiso de asegurar una beca de educación superior a todos los jóvenes con mérito, pertenecientes al 60 por ciento de los hogares más vulnerables y de clase media de nuestro país.¿Es éste un cambio significativo? Sí, sí lo es. ¿Es esto suficiente? No, no lo es. Por eso también estamos creando un nuevo sistema de créditos muy superior al que recibimos. Este sistema estará disponible para todos los jóvenes con mérito, con excepción de aquellos pertenecientes al diez por ciento de los hogares de mayores ingresos. Y para impedir que estos créditos se transformen en una pesada mochila para los jóvenes o sus familias, el nuevo sistema tendrá una tasa de interés subsidiada del dos por ciento anual, es decir, solo un tercio de la actual, lo que significa reducir prácticamente a la mitad el monto de las cuotas del actual sistema de Crédito con Aval del Estado. Adicionalmente, las cuotas no podrán exceder del diez por ciento del ingreso del joven cuando esté trabajando, y con la cuota 180, cualquiera sea el saldo de deuda, ésta se extinguirá automáticamente. Finalmente, el nuevo sistema será administrado y 
financiado por el Estado, remplazando así a los bancos.

Adicionalmente, el segundo semestre de este año entrará en vigencia la ley que permite a más de 110 mil deudores morosos del Fondo Solidario para la educación superior reprogramar y reducir sus deudas, salir del Dicom y tener una nueva oportunidad en el mundo laboral.

Para lograr estos objetivos, y asegurar que los estudiantes y sus familias tomen decisiones libres e informadas, hemos puesto en marcha el portal web www.mifuturo.cl que entrega información relevante sobre la excelencia de las instituciones de educación superior, el monto de sus aranceles, la duración de sus carreras, los niveles de deserción y las opciones laborales e ingresos promedio de sus egresados.
Sabemos que algunos proponen educación gratuita para todos y no solo a los más vulnerables y la clase media necesitada. Francamente, en un país con tantas carencias y desigualdades como el nuestro, no es justo ni conveniente que el Estado, con los recursos de todos los chilenos, financie la educación de los más favorecidos.

Con esta reforma estamos cumpliendo tres grandes compromisos de nuestro programa, que constituyen sentidas aspiraciones de la sociedad chilena. Primero, dar a acceso a educación de mayor calidad a todos los niños. Segundo, que ningún joven con mérito quede fuera de la educación superior por falta de recursos. Y tercero, que ninguna familia vea transformado el sueño de un hijo profesional en una pesadilla, por un endeudamiento excesivo.

Chilenas y chilenos, señoras y señores parlamentarios, muchos de los proyectos de ley necesarios para llevar adelante estas reformas se encuentran hoy en este Congreso. A nombre de los niños y jóvenes de Chile les pido encarecidamente sus aportes y pronta aprobación.Pero no basta con hacer las cosas correctas, también hay que hacer correctamente las cosas.

No basta solo con más recursos, debemos gastarlos bien. El segundo semestre de este año comenzará a funcionar la Agencia de Calidad y la Superintendencia de Educación Escolar, cuyo objetivo será asegurar la calidad de la educación y el buen uso de los recursos públicos, para que ningún peso del Estado vaya a instituciones que no ofrezcan educación de calidad. Por eso no dudamos, después de reubicar a sus alumnos, en revocar el reconocimiento oficial y cortar los recursos públicos a 37 establecimientos educacionales que, por su sistemática mala calidad, no merecían seguir recibiéndolos ni mucho menos educando a nuestros niños.

Y tan pronto este Congreso apruebe la nueva Superintendencia de Educación Superior, ella velará por la calidad, buen uso de recursos públicos y cumplimiento de la ley, por parte de universidades, institutos y centros de formación técnica.

Por cierto, sin profesores de calidad, respetados y bien remunerados, nunca tendremos una educación de excelencia. A eso apunta la Beca Vocación de Profesor y la nueva Carrera Docente que crea un nuevo sistema de evaluación y promoción, mejores remuneraciones, basadas en el mérito y los resultados, más que en los años y la antigüedad, e incrementa los requisitos de calidad de nuestros profesores. Los malos resultados de una Prueba Inicia tomada recientemente a egresados de Pedagogía, ilustran con elocuencia y dramatismo la importancia y urgencia de esta nueva Carrera Docente, la cual será obligatoria para los nuevos docentes y voluntaria para los actuales. Esta nueva Carrera Docente permitirá que un profesor o profesora destacada alcance como mínimo un salario de $ 1.250.000, lo que contrasta con los $ 760 mil actuales.

El liderazgo y capacidad de los directores también es fundamental. Por eso estamos convocando a los mejores a través de concursos públicos, mayores remuneraciones, exigencias y atribuciones, y hemos puesto en marcha un plan de formación de excelencia para mil 500 directores en tres años.

Y para evaluar mejor la calidad de nuestra educación, hemos incorporado nuevas pruebas Simce de Inglés, Tecnología de la Información y Educación Física, y una nueva prueba de Lenguaje en segundo básico, que se suman a las actuales pruebas Simce en cuarto y octavo básico y segundo medio.Quisiera terminar estas palabras sobre educación hablándoles directamente a los jóvenes. José Miguel Carrera decía que “la juventud es la edad de la energía, el vigor y la magnanimidad”, y agregaba que “si es capaz de grandes pasiones, lo es también de grandes virtudes, entregas y sacrificios”, y vaya que tenía razón. Porque fue un puñado de jóvenes como él los que lucharon y conquistaron nuestra independencia.

Dos siglos después Chile necesita más que nunca la alegría e idealismo de los jóvenes. Millones de abnegadas manos trabajan y se esfuerzan para que ustedes puedan estudiar. Nunca antes en nuestra historia una generación había tenido tantas oportunidades de educarse y desarrollar sus talentos, como las que tienen los jóvenes del Chile de hoy. Valoren este esfuerzo estudiando y entregando lo mejor de ustedes mismos y aprovechen esta oportunidad, sin renunciar a sus sueños ni convicciones. Valoro a los jóvenes idealistas y rebeldes que quieren construir un mundo mejor que el que heredaron de sus padres. Pero deben recordar que también tienen deberes. Con sus estudios, con sus familias, con su país y sobre todo con ustedes mismos.

Al fin y al cabo, tarde o temprano Chile será lo que ustedes quieran que sea. Solo si trabajan hoy por la paz, Chile será un país en paz. Solo si actúan hoy con justicia, Chile será un país justo. Solo si estudian hoy con esfuerzo, Chile será un país desarrollado. Y solo si miran al futuro con esperanza, Chile será un país más alegre y feliz.